
Con un llamado a toda la comunidad para restaurar el mural en homenaje a las víctimas de la Masacre de Monte, ocurrida en mayo de 2019, la Casa de los Derechos Humanos del pueblo reaviva la llama de la memoria para gritar su “nunca más” contra las víctimas de la violencia institucional, que dejó cuatro jóvenes muertos y una joven gravemente herida.
Desde el domingo llevan adelante la tarea de repintar el mural ubicado a metros del lugar exacto en el cual chocó el Fiat 147 tras la balacera que recibió por parte de la policía, que los persiguió sin razones. “Desde la Casa de los DDHH Madres del Pueblo queremos que sus caras no se borren por eso repintamos el mural de Camila, Danilo, Gonzalo, Aníbal y Rocío, para seguir manteniendo la memoria viva: llevemos sus rostros como bandera”, dijeron desde la institución local nacida luego de la masacre.
“Repintar es más que dar color, es sentir que todavía están aunque pasen los años. Repintar es más que pasar pinceles en la pared, es encontrarnos y reencontrarnos para abrazarnos en la lucha. Repintar es más que resaltar una imagen en el muro, es plasmar el recuerdo en un momento que trasciende, y ahonda en lo más profundo de nuestros corazones, interpelando nuestra conciencia colectiva y nos invita al pedido de Justicia. Invitamos a toda la comunidad de Monte a repintar, a abrazar, a matear, a luchar”, dijeron sus integrantes. La convocatoria es a partir de las 10 en Colectora 9 de Julio y López.
Condenados por matar
Por la matanza, en 2023 recibieron la pena de prisión perpetua los ex policías Rubén García y Leonardo Ecilape, mientras que para Mariano Ibáñez y Manuel Monreal, la condena fue de 15 años de cárcel. Los dos uniformados que deberán cumplir la pena máxima fueron condenador como coautores del delito de “homicidio agravado por el abuso de la función policial y por ser cometido mediante el empleo de arma de fuego” en perjuicio de Danilo Sansone (13), Camila López (13), Gonzalo Domínguez (14) y Aníbal Suárez (22), “en concurso ideal con el delito de tentativa de homicidio agravado por el abuso de su función policial y por el empleo de arma de fuego”, por el ataque a la sobreviviente Rocío Quagliarello.
Los chicos estaban asustados y con miedo ante la persecución. En el proceso quedó comprobado que los uniformados provocaron que el Fiat choque contra un camión que estaba estacionado. Es por eso que la Justicia calificó el hecho como un abuso de autoridad por parte de los funcionarios públicos.

En 2024 fueron condenados los agentes José Alfredo Domínguez, José Manuel Durán y Héctor Enrique Ángel. Distintos testigos oculares declararon que Domínguez, Ángel y Durán fueron los que le tomaron declaración y señalaron que omitieron incluir partes de sus legítimos testimonios en los cuales describen la persecución y la balacera. Además, contaron que los agentes se burlaron de sus declaraciones para la reconstrucción de los graves hechos ocurridos. En las actas faltaron otros aportes que habían hecho, como el croquis que diseñaron sobre el caso de violencia institucional que presenciaron. Previo a dictar las sentencias, el magistrado recibió a las familias de las cinco víctimas y mantuvieron una charla sobre el tema.
Estos tres sujetos pertenecientes a la Bonaerense recibieron penas de cuatro años y seis meses de prisión porque se comprobó que intentaron ocultar el violento y letal accionar de otros uniformados durante la persecución y balacera
La Masacre ocurrió durante el gobierno de María Eugenia Vidal como gobernadora y Cristian Ritondo como ministro de Seguridad bonaerense, donde se promovía y naturalizada que las intervenciones policiales podían terminar con un resultado de muerte, en el marco de la llamada “doctrina Chocobar”, fomentada por la entonces Ministra de Seguridad de la Nación, Patricia Bullrich.
El revelador video de un policía con medio cuerpo afuera de la patrulla dispara contra los chicos fue la clave para las detenciones de los uniformados. Se cree que al menos dos patrulleros persiguieron al auto donde iban los chicos. Desde esos móviles, dispararon al menos cuatro policías y produjeron la mayor masacre que recuerde Monte.

En ese entonces la intendenta era Sandra Mayol, que fue cuestionada fuertemente por los familiares de las víctimas. Ella y dos de sus funcionarios Hugo Medus y Claudio Martínez, este último secretario de Seguridad, quienes negaron que hubieran existido disparos contra el Fiat 147 en el que viajaba Gonzalo, algo que finalmente la justicia confirmó. Además de los policías, también se investigó la responsabilidad de Mayol y del oficial de Bomberos de San Miguel del Monte Nelson Barrios, desafectado de su cargo por “limpiar” la escena del crimen antes de la llegada de los peritos, con la finalidad de borrar las huellas de la balacera que hizo chocar al auto.
En un comunicado, la Comisión Provincial por la Memoria (CPM) se expidió de forma muy dura contra Mayol: “La trama de encubrimiento que se desplegó en las horas posteriores a la masacre no pudo haberse realizado sin el conocimiento e, incluso, la anuencia de la intendenta Mayol“.
Hola!! con el permiso de los administradores quería dejar este posteo, por si hay en el grupo o conocen alguna mamá o papá que haya pérdido un hijo (por fallecimiento) y decirles que pronto va a haber una charla de un grupo que se llama Renacer, qué es un grupo de ayuda mutua donde padres y madres que hemos perdido un hijo/a/s nos ayudamos a trascender el dolor y llenarnos de amor.
Les dejo el flyer por si hay alguien que lo necesita o conoce a alguien que lo necesita.
La reunión será el sábado 31 de mayo en el centro cultural de Monte.
Cualquier cosa pueden comunicarse conmigo al teléfono 153446 1536.
Desde ya muchísimas gracias por compartirlo.
Tal vez vos no lo necesites pero hay alguien que sí
Gracias gracias gracias.
Viviana mamá de Rocío.